Puede parecer sorprendente, pero en un vídeo en directo, lo más difícil es conseguir que los aplausos suenen como aplausos. Para que se tenga la sensación de estar en mitad del público, es importante que el sonido de los aplausos no sólo se oiga delante y detrás, sino como si llegara de todas partes.
Con la tecnología YSP, las voces, los instrumentos y los aplausos del público ofrecen por primera vez un sonido equilibrado y natural que suena tan real como si uno estuviera asistiendo al directo.